lunes, 21 de junio de 2010

Aprender árabe

Una de las preguntas típicas que me hacen continuamente es si en Argelia se puede aprender árabe. Yo lo he intentado, sin éxito, así que mi respuesta basada en la experiencia es que no, pero voy a tratar de explicar las razones.

El árabe que se habla en la calle, al menos en Argel, no es el árabe estándar, el que podríamos llamar árabe clásico, sino un dialecto local bastante diferente, enriquecido con muchas palabras de origen fundamentalmente francés, o con derivaciones propias.

La lengua árabe estándar es la escrita. Pero el problema es que en esa lengua escrita sólo se escriben las consonantes y muy pocas vocales. Es algo parecido al lenguaje de los SMS. Si no se conoce previamente la palabra, no se puede pronunciar.

Los libros para aprendizaje del árabe sí llevan escritas las vocales. Pero surge otro problema. Los métodos de enseñanza que existen en Argelia no están pensados para el árabe como lengua extranjera, porque los aprendices de árabe escrito son siempre los niños, que ya lo hablan. Y los libros muestran dibujos de cosas que los niños ya conocen, como un libro, un león, una oveja, una casa, una mesa… Se memoriza la palabra escrita a partir del conocimiento del nombre hablado del objeto.

En su día intenté aprender árabe, pero partía de cero. El profesor me trataba como a un niño y esperaba que repitiendo el alfabeto en orden, empezando por alif, me quedara con él. Me cambiaron de profesor y el nuevo era el típico que cada día encuentra una disculpa diferente para no venir a clase. Me acabé desanimando.

Pienso que para aprender árabe en Argelia hay que venir ya con una base, conocer las letras y un cierto nivel de vocabulario.

sábado, 19 de junio de 2010

Líneas aéreas para volar a Argelia

He nombrado en mi anterior post a diferentes compañías aéreas para viajar a Argelia y supongo que más de un lector querrá saber cuál es mi ranking de calidad.

Establecer un orden atendiendo a la relación calidad-precio es casi imposible. Las tarifas aéreas varían mucho. En unas ocasiones se puede viajar por poco más de 150 euros, ida y vuelta, y en otras sale unas tres veces más caro. Tampoco es lo mismo ir a Madrid o Barcelona que hacerlo a otras ciudades. Y ahí se me escapa la razón. Así, Iberia viaja de Argel a Madrid; si se va a Barcelona sale por unos 200 euros, pero si se vuela a Bilbao el coste se pone en casi 300 euros. Con Spanair el tema es aún más sangrante, porque viaja a Barcelona desde Argel y ofrece salir desde Madrid por tarifas de 160 euros; pero si la salida desde Bilbao nos ponemos al mismo nivel que Iberia.

En mi caso, entre Argel y Bilbao la mejor opción es Lufthansa, vía Frankfurt. Me permite salir de madrugada de Argel y estar en Bilbao al mediodía siguiente; o salir de Bilbao por la tarde y estar a medianoche en Argel. La atención en vuelo es aceptable, dan de comer bastante bien, incluida una riquísima cerveza alemana en clase turista, y el único problema es la escala en Frankfurt, donde hay que pasar control de equipaje de mano y caminar bastante.

La siguiente en mi lista es Iberia. Sus tarifas son más caras que las de Air Algérie o Spanair, pero la atención en Argel es impecable, gracias a Emilio, el delegado de la compañía. Es un aspecto que no siempre valora, pero saber que el vuelo va a salir a su hora, que si se pierde una maleta la compañía va a preocuparse de solucionarlo, que si algo falla hay detrás unos profesionales que van a dar la cara, no lo ofrecen ni Air Algérie ni Spanair. Otra ventaja de Iberia es que permite embarcar dos maletas de hasta 23 kilos cada una, frente a los 30 kilos de Air Algérie o a los sólo 20 de Spanair.

Aunque escribo de oídas, me han dicho que la siguiente en la lista debería ser Alitalia, que ofrece la ventaja de viajar por la noche, pudiendo aprovechar toda la jornada en Argel y estar al día siguiente pronto en España. Lo de viajar vía Francia con Air France o con Aigle Azur no lo probado, pero me lo han desaconsejado.

Finalmente, entre Air Algerie y Spanair prefiero las líneas aéreas argelinas, a condición de no meter la mano en la guantera de los asientos, no vaya a salir mordida por los bichos que han criado los restos que dejó un pasajero anterior. Sigue siendo Air Cuscús, el apodo con la que la denominan muchos argelinos, pero sus pilotos me ofrecen más confianza que los de Spanair. El problema de Air Algérie es que en vuelos nacionales, esos mal llamados “domésticos”, como si los demás fueran vuelos salvajes, la flota que utiliza es de echarse a temblar.