jueves, 24 de enero de 2008

La femme de m�nage

Casi todos contamos en Argel con una empleada de hogar. Se trata de un lujo que en cualquier ciudad espa�ola ni nos plantear�amos. Al contrario, creo que me sentir�a hasta mal teniendo a alguien trabajando mientras yo no hago nada. Pero aqu� los sueldos son muy inferiores y est� al alcance de cualquiera de nosotros. Adem�s, estrecha los lazos con la gente, se est� ayudando a ganarse un sueldo a personas que realmente lo necesitan, se tiene a alguien m�s en casa con quien profundizar en el conocimiento de su forma de ver la vida. Pero sobre todo permite disfrutar de un tiempo de ocio muy valioso, sin necesidad de dedicar el fin de semana a limpiar la casa.

En cuanto tuve casa, en septiembre, dispuse de asistenta, que aqu� llamamos, en franc�s, femme de m�nage (pronunciado, m�s o menos fam de menaj). No estuve nunca contenta con ella, porque no limpiaba, aunque me daba pena dejarla en la calle y le prorrogando los ultim�tum que le daba. Hasta que descubr� que adem�s me estaba robando dinero.

Aquello me afect� mucho y estuve muy triste varios d�as. Se me junt� con una sentencia judicial injusta y me dio un baj�n del que realmente a�n no me he recuperado, porque luego me lleg� una bajada de tensi�n el mismo d�a que la desped� y seis d�as m�s tarde fue el atentado de Al Qaeda, que todav�a me tiene agarrado.

Hace unos d�as contrat� a Anissa. Ya cont� aqu� las circunstancias de su entrevista. Me hab�a llevado un gran disgusto porque una amistad parec�a convertirse en enemistad y mi estado de �nimo era pat�tico. Lleg� a mi casa y yo no dejaba de hablar much�simo m�s deprisa de lo habitual, tartamudeando, medio desesperado. En su presencia me tom� una pastilla para la ansiedad que en media hora me produjo un efecto terrible. Yo creo que se quiso aprovechar un poco de la situaci�n, porque trat� de que yo le pagara por cuatro horas a la semana lo que otros pagan a sus empleadas que trabajan seis d�as y seis horas y media al d�a.

Anissa es marroqu�, de Fez. Estudia medicina en Argel y vive en el Colegio Mayor que est� enfrente de mi casa. De momento es bastante desastrosa, porque ha venido los d�as que ella ha querido, no los que le indiqu� yo, sin acabar de limpiar la casa. A�n no he podido coincidir con ella en casa para se�alarle lo que quiero que haga y lo que no. Creo que no es normal que ella ponga la lavadora y me toque a mi tender la ropa. O que me eche a lavar las corbatas.

El primer d�a que vino a trabajar, cuando llegu� por la noche, me encontr� ca�do en el suelo, junto a la puerta del sal�n, un mantel individual de mesa. Al recogerlo vi que hab�a otro ca�do junto a la puerta del ba�o. Luego otro a la entrada de cada habitaci�n? �Hab�a usado los manteles individ�ales como si fuesen felpudos para las habitaciones!

Como siempre me pasa en estos casos, me da pena, porque necesita el dinero para proseguir sus estudios de medicina. Pero yo no tengo tiempo, ni conocimientos, para formar a una chica de 22 a�os en c�mo se lleva una casa. Y dudo que ella quiera aprender. As� que mi soluci�n es encontrarle una casa en la haya alguien que la dirija. Otra soluci�n ser�a que se me quedara interna, se ahorraba el Colegio Mayor y yo tendr�a m�s tiempo para explicarle las cosas. Eso, que en buena l�gica parece una simbiosis perfecta, suena como muy poco sensato por mi parte. Adem�s, como Anissa es una chica bastante guapa, o al menos a mi me lo parece, la afici�n de los chismosos que conozco ser�a dar por sentado que compartimos cama, como si ella no tuviera nada mejor que hacer que liarse con alguien que le doble en edad y encima limpiarle la casa.

Y admito sugerencias y hasta ofertas de empleo para Anissa.

No me resisto a contar una historia de estaciones de tren no relacionada con Argelia. Un buen de amigo me ha mandado un correo explicando que lo que me sucedi� en la estaci�n de tren de Delicias, en Zaragoza, es habitual en todas las estaciones, por la actitud caprichosa de quienes se creen que ellos son la ley. Copio lo que me cuenta:

?Hola Jos!Lo que te pas� a ti esa sola vez, nos pasa a los aficionados todos los d�as. Imag�nate en qu� cantidad de estaciones habr� estado, en todas ellas pretende adif que est� prohibido sacar fotos (con servicios de vigilancia al efecto) y en ninguna pone nada de la prohibici�n.
Por qu� no pone nada? Porque para poner algo es necesario mencionar la norma por la cual fotografiar est� prohibido. Y dicha norma no existe. Tan sencillo como eso.Como 'deferencia' hacia los aficionados a la fotograf�a ferroviaria, renfe y adif sacan un permiso para poder sacar fotos en estaciones. Permiso que, si funcionara bien, podr�a ser �til, pero que es papel mojado doblemente: primero porque autoriza una excepci�n a una norma que no existe, y segundo porque muchos de los vigilantes de las estaciones no tienen pajolera idea de que el permiso exista (y ya puedes argumentar, ya). Incluso los que saben que existe, muchas veces, no te dejan hacer unas fotos concretas 'por sus santos cojones', o te amenazan... a un compa�ero de Valencia uno de estos le amenaz� y se neg� a identificarse... acabo el vigilante tirado en el suelo enca�onado por las armas reglamentarias de dos polic�as nacionales.El tema es que con el permiso ese de marras, es obligatorio identificarse ante cualquier personal que lo exija. Personal que, a pesar de que seg�n la LOPD no puede apuntar tus datos personales, a veces los apunta igualmente. Y luego a saber que hace con ellos. Los de un compa�ero de Bilbao, mismamente, los usaron para acusarle de una infracci�n que no cometi�. Es que al vigilante se le estaba colando mucha gente que s� la comet�a, y no consegu�a identificarles. Y como ten�a sus datos... en fin, que casi 2 a�os de recursos por v�a administrativa, para al final, que en distintas instancias, desde la delegaci�n provincial de transportes de Vizcaya, hasta el mism�simo Ministerio de Fomento, no le hagan ni caso. Esta misma ma�ana ha pagado la multa?.

Yo no s� qu� decirle. Le he preguntado si lo pod�a colgar como denuncia y, como est� de acuerdo, aqu� lo pongo. Creo que es bueno que estas cosas se sepan y que los atropellos y abusos se puedan denunciar en alguna parte. Si sirve de consuelo, eso es una excepci�n en un estado de derecho, pero es norma habitual en Argel. Aqu� te puedes saltar todas las normas sin que te hagan nada y que el polic�a te quite incluso una multa grave como deferencia personal. Pero tambi�n ocurre que te sancionen sin haber hecho nada. A mi casi me llevan a la c�rcel durante el Ramad�n pasado por aparcar mi coche junto a la Residencia del Embajador de Gran Breta�a, en un lugar que no estaba prohibido, en una calle llamada com�nmente Chemin de Glycines. Seg�n la polic�a, hay muchos sitios no se�alizados en los que est� prohibido aparcar, por seguridad, as� que siempre hay que preguntar. Lo gracioso es que yo hab�a aparcado hacia las seis y media de la tarde, cuando est�n todos rompiendo el ayuno, y no hab�a absolutamente nadie. Cuando regres�, al cabo de unas tres horas, la zona estaba acordonada y pod�a haber en los alrededores m�s de un centenar de polic�as. Me pas� m�s de dos declarando y tomaron nota de mis datos personales infinidad de veces. Acabaron dici�ndome que me dejaban libre, pero que tendr�an que imponerme una multa. Me la dieron, pero como es absolutamente injusta es evidente que no la pagar�. De hecho, no s� ni donde est�.

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